noviembre 09, 2007

COTIDIANO

A pasos agigantados crece,
de modo pausible padece,
las llagas del cuerpo le duelen,
quizá no tanto,
como las que en el alma tiene.
La miro sufrir sin odio,
la miro vivir sin rencor,
en su amor no se ve el desprecio,
lo cierto es que quiere con el corazón.

Es sin embargo, tan dolorosa su imagen,
que no puedo contenerme,
el cuerpo se me desdobla,
una lágrima me traiciona,
es tan fuerte su recuerdo,
que me ha dejado sin aliento.
Tan solo 5 años, ¿serán más?
Por su madurez vacilas,
por su sonrisa reafirmas,
qué tan valioso es un dulce,

que con tus pies casi pisas.

5 comentarios:

Timur dijo...

me gusto su poema, conmueve

Dídac Muciño dijo...

:(..

Bonito poema, la infancia termina, cuando dejamos caer, los juguetes y nuestros pequeño cuerpo.

:(..

¿Te puedo preguntar algo? ¿por que los recuerdos duelen, por que cuando estoy "bien", entran imagenes que destrullen la dicha que he contruido?, y entre menos lo pienso, otra vez estoy ahi, en esa oscuridad de tristeza y abandono, me carcome la melancolia y me mata la nostalgia, las heridas se vuelven mas notorias que antes... ¿por que dule el supuesto amor?..

Saludos me dio gusto verte, por estos rumbos.. (perdon por tomar tu espacio para mis preguntas)

osbel dijo...

pues yo diría que la infancia es algo muy subjetivo... hace un buen rato que dejé la adolescencia y aún todos me dicen que soy un niñito... con todos los atributos que este concepto sitgnifica, incluso la estupidez...
... bueno, no todos, porque sí tengo vello púbico jojojo!!
perdonen mi vulgaridad :)

Anónimo dijo...

Es conmovedor y fuerte!!! nos trastoca a todos, pues todos, en algun momento de la vida le hemos pisado su dulce a alguien... Hay dolor del corazon, hay dolor del alma, hay dolor del cuerpo...

¿qué hacer cuando nos pisan nuestro dulce?

Abrazos.

Erranteazul dijo...

De tanto mirarla, de tanto escucharla, de tanto llorarla...sólo quisiera estar en su mundo.